sábado, 27 de noviembre de 2021

Aventura /15)

Romina les mandó un vídeo donde les mostraba como encararía a Alberto, todas estuvieron de acuerdo.
Una de ellas, la que se veía más diferente al tiempo que había pasado desde que Alberto la dejara, se ofreció a seguir a Romina para ver como iba todo, el resto aceptó.
La mujer les contó todo, que se había sentido extraña, y temblado al verlo, que tuvo que contenerse para no cachetearlo, escupirlo, pedirle explicaciones, pero que no se preocuparan porque había sabido estar a la altura de las circunstancias.
Que todo había salido bien, Alberto cayó redondito.
Todas pusieron emojis de alegría, exaltación, gloria, descorche de botellas, copas de vino, de cerveza, de champan. 

sábado, 20 de noviembre de 2021

Aventura /14)

Tuvieron varios debates, diferentes propuestas, ideas, formas. Casi llegan a ponerse agresivas entre sí durante el intercambio de mensajes, pero lograron recuperar el foco.
La idea de que una mujer más joven aunque parecía una idea obvia surgió de varias, una dijo que debía ser por ese lado, otra agregó lo de joven, otra que debía tener ciertos rasgos y tipo físico, y la siguiente el carácter. Entre todas juntas fueron armando el personaje. Una de ellas, Fernanda, sugirió a su vecina, se había mudado después de que la dejara Alberto, dijo, esta mujer era una prostituta con la que se llevaba muy bien, la mujer aceptaba clientes cada tanto, en general vivía de lo que sacaba de una pagina (así les dijo) llamada Onlyfans, ella no sabía mucho lo que era pero por lo que esta le contaba se trataba de algo que tenia que ver con el contenido porno, pero que la mayoría de los que pagaban por sus servicios eran extranjeros. Les pasó la foto de su vecina, y también que medio la había tanteado para ver qué pesaba y aceptó, le divertía el juego que se proponían.
A muchas el precio se les hizo excesivo, pero después de ver las fotos y escucharla hablar coincidieron que era perfecta para el rol.


sábado, 6 de noviembre de 2021

Aventura /13)

Dar vuelta la pagina, jaja pero si fueron las únicas que hay en mi vida, el resto es un cuaderno en blanco.
No, yo a estas mujeres las voy a acompañar a lo que sea, hasta caparlo a ese hijo de puta.
Obvio me uní al grupo, y sí todas historias parecidas, me sentí extraña, supongo que así sería alcohólicos anónimos y también donde iban los drogadictos, acá todas tenían el mismo comienzo dulce, donde nos hacía sentir las únicas en el mundo y el como todo se venia abajo una vez que que empezaba la convivencia. Por un ratito sentí vergüenza, qué estábamos haciendo ahí, escribiendo o mandando audios o incluso una vídeos contando su patética historia, nos lamíamos las heridas, nos dábamos consuelo, nos regodeábamos en nuestra desgracia. Yo siempre fui más bien solitaria, y esa cosa media de manada no me iba, de hecho estuve a nada de salirme del grupo. Me contuve cuando Mirta que parecía que había estado leyendo mi pensamiento, o para no ser ombliguista seguramente el de varias, escribió que esto no era solo para consolarse, que estaba muy bien y todo pero que la cosa pasaba por otro lado. Y fue viva, para que o todas se pusieran a preguntar con qué o mandaran el signo de interrogación puso antes de finalizar el mensaje: Venganza.


sábado, 30 de octubre de 2021

Aventura /12)

 Poco días después de que la dejará Ernesto, y Leticia fuera de la casa al trabajo como una autómata, cumplía su horario y tareas religiosamente y después llenaba la pileta del baño y zambullía su cara donde pegaba un grito, después lloraba mientras se tomaba un tranquilizante y se iba a acostar a las 7 de la tarde hasta el otro día cuando sonaba su reloj a las 7 de la mañana. Una de esas tardes antes de que se tomara el somnífero tocaron el timbre, vio por el portero eléctrico a una mujer que no conocía, esta le mostró una foto de ella con Ernesto y Leticia inmediatamente presionó el botón para que esta entrara. Era una mujer más o menos de su edad y tipo físico. 
-Mirta, un gusto.
-Lo mismo digo. ¿Querés sentarte?
-Gracias.
Quedaron frente a frente, Leticia expectante.
-Te escucho.
-Como seguro te diste cuenta, yo soy una de sus ex, y bueno no quiero hacerme la adivina pero probablemente Ernesto te pareció un sueño hecho realidad y se fue convirtiendo e una pesadilla aunque igual cuando te dejó quedaste hecha mierda.
-Sí.
-Mal de muchos consuelo de tontos dicen, así que o te va a servir de nada saberlo, pero nos hizo esto a varias. ,Mirá, no te quiero abrumar, ya bastante mal te debe tener la ruptura, pero quiero que sepas que no estás sola, te dejó mi número de Whatssap, por si te interesa saber más de Ernesto y de por qué te dejó, entiendo si querés dar vuelta la pagina y te felicito.


sábado, 23 de octubre de 2021

Aventura /11)

Lo vi salir del departamento, confundido, sin saber para donde ir, caminó casi contra la pared, le faltaban fuerzas, lo seguí, tuve que demorar el paso de lo lento que iba, se sentó en el banco de la primera plaza que encontró y se quedó ahí con las manos sobre las rodillas.
Estuvo ahí más de una hora, apenas se movió, estaba como hipnotizado. Sentí tanta alegría ¡de verlo así,  entre sorprendido y angustiado, sin saber como procesar lo que le estaba pasando. Estaría reflexionando de todo lo que nos hizo, de las veces que se fue sin decirle nada a ninguna, no creo, o tal vez sí, quien sabe.
Me sorprendió cuando se levantó, hacia tanto que estaba en la misma posición sin casi moverse que me resultó inesperado, volvió a caminar, se metió a un bar, pidió un cortado, dos medialunas y se las comió con furia.


sábado, 16 de octubre de 2021

Aventura /10)

Ernesto se despertó solo, con dolor de cabeza, le costó erguirse, empezó a mirar la habitación y notó algo diferente pero no se dio cuenta qué hasta que no miró otra vez. Faltaban cosas de la mesa de luz, y de la cómoda, no había desodorantes, ni perfumes, ni cremas, ni nada. Con esfuerzo logró pararse y caminar hasta el cajón de la cómoda, e la parte de Victoria no había ropa, fue hasta el placar y lo mismo. Se sentía mareado, se sentó en la cama, inspiró por la nariz y expiró por la boca. Fue hasta la cocina, revisó los estantes y cajones, todo vacío, igual la heladera. En el baño lo mismo. Se empezó a desesperar, comenzó a temblar, tuvo un ataque de pánico, se quedó llorando y temblado un rato, perdió la noción del tiempo hasta que sintió el timbre. 
-Hola. 
-Hola, señor. ¿Ya recogió sus cosas? 
-De qué está hablando.
-Victoria ya me entregó la llave y me dijo que usted me entregaría la otra a las doce, tengo que mostrar el departamento

sábado, 9 de octubre de 2021

Aventura /9)

Lo ignoraba, le dolió darse cuenta que Victoria le aplicaba la misma técnica que él usara con tantas mujeres, evadía su mirada, sus caricias, sus besos, lo miraba cansada, desganada, aburrida, fastidiada de verlo.
Trató de no agobiarla, de no absorberla, cuando estaba junto a ella, trataba de solo hablarle cuando consideraba que no la molestaba.
Igual Victoria se seguía alejando, Ernesto empezó a angustiarse, a sentirse solo a deprimirse, era un dolor muy profundo, que no lo deja respirar, a lo que a ella respondió de la forma más educada pero también más fría que pudo, quería demostrarle sin decirle que ya estaba cansada.
Es más de lo que yo hice por todas mis ex, a ninguna le di señales, quizás eso las hubiera ayudado.
Su dolor empeoró y consideró que no debía ser solo angustia. Decidió ir al doctor.
Se acostó con esa idea, cuando se levantó al día siguiente no podía moverse de la cama. 

sábado, 11 de septiembre de 2021

Aventura /8)

Creía que esta podía ser la indicada, Ernesto había estado con varias mujeres, tratando de transformar a cada una de ellas en su ideal, aunque todas y cada vez más rápido, se convertían en muecas grotescas de lo que él esperaba, casi en parodias.
Victoria era diferente, ella no era una mujer opaca, insulsa y quedada como todas las que se había buscado hasta entonces, a ella no la podría moldear, incluso después de la primera impresión, a la cuál siempre consideraba engañosa, al verla en repetidas ocasiones, su visión sobre ella se ratificaba, a Victoria tendría que seguirla y moldearse él a sus caprichos, no sabia lo que eso podía depararle, o sí lo aguantaría, pero quería intentarlo.
Cuando le hablo que quería salir con ella, Victoria, lo miro y le dijo: ok.
Al principio no hubo mucha compatibilidad, ella le resultaba agresiva, el estilo de tantas mujeres a las que él besaba, acariciaba y cogía como quería, mientras estas se deshacían en orgasmos en su mayoría fingidos. A él no le importaba que fueran fingidos, sino que ellas se vieran en la necesidad de demostrar que él las complacía, aunque no fuera así, era como un patrón cruel que disfruta del sumisión de sus empleados, y eso lo satisfacía mucho más, que si les hubiera causado verdadero placer.
Por esa falta de docilidad y sumisión por parte de Victoria, fue que Ernesto no consiguió una erección.
Victoria lo miró y sonrió.
-A ver, sentate apoya la almohada contra la espalda y cerra los ojos.
Victoria le practico sexo oral por varios minutos, hasta que consiguió que Ernesto tuviera una erección.
Siempre que tenían relaciones las iniciaba ella, que también siempre iba arriba, cabalgando sobre Ernesto.
Con ella, no sabia lo que era la rutina, todos los días decidía algo distinto, donde comer, a veces en restaurantes que le llevaban medio sueldo, otras en un puesto que vendía salchichas, otras en un McDonald. Muchas veces pagaba ella, le sobraba la plata, había compuesto varias canciones para diferentes grupos pop adolescentes, de esos que un multimedios se encargaban de fogonear, llenaban estadios y se separaban a los 2 o 3 años, Alberto al enterarse, le costó un montón creer que hablaba en serio, hasta que Victoria le mostró los manuscritos de esas canciones.
-Pero vos, no entiendo...
- ¿Qué no tienen que ver conmigo? lo sé, escribir esta mierda es algo terapéutico, me cago de risa con las cursilerías espantosas que compongo.
- ¿Hay algo que te preocupe en la vida?
-Qué pregunta pelotuda y solemne, pero te la voy a responder, sí, a la muerte. 
- ¿Le tenés miedo?
-Sí, pero quiero desafiarla algún día y lo voy a hacer. 
Ernesto, no supo qué decirle, sus desafíos a la vida eran calculados, nunca daba un paso sin medir sus consecuencias.
- ¿Y respeto?
-Para mí 2 tipos de respeto, el que no pasa de ser más que miedo camuflado y la admiración. Yo a la muerte le tengo un poco de los 2, y como siempre que he sentido miedo o admiración por algo, he decidido enfrentarlo, desafiarlo.
Ernesto después de escucharla tuvo la seguridad que Victoria nunca sería realmente suya.
Paradojicamente, estaba entrando en el mismo ciclo que entraban las que habían sido sus amantes, en el de comprender que él quería a Victoria, mucho más de lo que ella lo quería a él, era una sensación ambigua, por un lado la desagradable certeza de saber que ella sería quién terminará las cosas, que siempre aunque fuera indirectamente, lo manejaría, y por el otro, el conocer el amor, era algo inmenso, descomunal, de una intensidad absoluta, era consciente del dolor que eso podía e iba a generarle, pero lo aceptaba, ya que era lo más fuerte que había sentido por alguien, y eso lo hacia sentirse más vivo pero a la vez angustiado.

sábado, 4 de septiembre de 2021

Aventura /7)

 Si esto fuera una ficción, sea telenovela, serie, película, novela, tendría que haber hecho un cambio radical, o iniciar un viaje, pero no tenia plata para nada de eso, por lo que me conforme con un café negro con mucha azúcar, y me fui a trabajar. 
Volver a la casa, se me hacía horrible, por 2 semanas, me estuve acostando al poco rato de llegar, cuando me levantaba, me dolía todo el cuerpo, de tanto estar acostada.
Me di cuenta que no podía seguir así, aunque tampoco sabia como cambiar, por eso fui al medico. 
Este me dio el número de un psiquiatra, además de recomendarme tomar unas vitaminas, de esas que echas en agua y se toman como si fuera un jugo.
Me sentí un poco mejor, sobre todo después de ir al psiquiatra, y empezar a descargarme ahí, además también me dio un calmante, me sentí rara, ya que solo estaba bien, por las drogas.
Igual seguí adelante, en esta ida si no sos rica, tenés 2 opciones, o te suicidas o sobrevivís. 

Decidí pintar el departamento, ya que no podía mudarme, por lo menos darle una lavada de cara al lugar, y hacer de cuenta que comenzaba de nuevo.
Lo pinte de un blanco aséptico, reflejando como me sentía, vacía, pero también sin ilusiones vanas.
De a poco fui saliendo adelante.

sábado, 28 de agosto de 2021

Aventura /6)

Constantemente tenia miedo, sentía que vivía en una burbuja y que en cualquier momento esta explotaría, no veía futuro a mí relación con Ernesto, no quería tener hijos con él, porque solo deseaba su atención para mí, tampoco hablarle de casamiento, para no quedar como una cursi, y sobre todo para que no me rechazará. 
Al cuarto mes empece a sentir que se iba alejando de mí, no es que fuera un hecho concreto, así de golpe, no, era algo sutil pero progresivo, lo noté en su mirada cansada, en sus suspiros, nunca le había interesado mucho lo que yo pudiera contarle, ni tampoco lo había disimulado lo suficiente como para que yo no me diera cuenta, por eso siempre me limitaba a escucharlo, eso sí le gustaba, como todo egoísta y narcisista, le encantaba hablar de él, de su trabajo, de sus cosas, siempre mandándose la parte, y yo ahí escuchándolo con veneración, pero después empezó cada vez a hablar menos, hasta que apenas se comunicaba conmigo lo imprescindible.
La incertidumbre en la que me sumí, no sabía qué hacer para retenerlo, temiendo que eso lo alejará más.
Por eso trataba de ser como un perro que le teme a su amo, ser complaciente pero a la vez inexistente todas las veces que él lo necesitará.
Hasta que llegó el día en que entré a casa y encontré una nota sobre la mesa, la agarre sabiendo lo que seguro diría.
Mariana:
Me voy, creo que nunca tuvimos mucho en común, lo nuestro no daba para más.
Adiós Ernesto.
Rompí la hoja en un montón de pedazos, mientras lloraba a moco tendido.
Lloré un montón, hasta que me agarró un dolor de cabeza insoportable de tanto llanto, me di una ducha, me tome una ibupirac y me acosté.

sábado, 21 de agosto de 2021

Aventura /5)

Agradas más así.
Esas palabras se habían convertido en mi oración, cada vez que me miraba al espejo,  no me veía a mí sino lo que Ernesto esperaba que fuera, lo peor es que me sentía bien así, como drogada, Ernesto era mi droga. 
Durante los primeros meses, no pensaba en nada, ni siquiera en lo típico de los prometidos: el futuro, para mí lo importante era salir del trabajo, para ver a Ernesto, para olerlo, tocarlo, serle útil, porque eso sí, él me iba moldeando, para que le sirviera, yo antes de volver al depa tenia que pasar por la tintorería a buscar su ropa, porque el señor no se ponía ropa que no pasara por la tintorería. También por mensaje me enviaba si había tenido algún antojo, si como una embarazada, que un helado, que algún postre de esos que venden en los supermercados, que alguna masita de la panadería. 
De nada de eso renegaba o me quejaba, al contrario, me sentía imprescindible.
Luego Ernesto no se limitó a que fuera su sirvienta, y su mandadera, también quería que fuera una esclava en la cama.
Y eso no me lo puedo perdonar, haber cedido a cosas que me daban asco, que me denigraban, no puedo siquiera teclearlas, lo veo una y otra vez en sueños, yo complaciendo sus asquerosidades. 
Eso es lo peor de haber consentido que me hiciera hacer esas cosas, que una puede justificar mil cosas, pero las que tiene que ver con el sexo no, es algo que te marca, que no se te olvida.

sábado, 14 de agosto de 2021

Aventura /4)

 En la cama fue bastante bueno, se acordó de que las mujeres tenemos un clítoris, y que si quieren que una tenga un orgasmo real y no les ande fingiendo se tiene que aplicar en esa área, hasta termine llevándome la mano a los labios, para no ponerme a gemir, ya que las paredes de mi depa, son de cartón.
Le tuve que devolver el favor, y yo también hacerle un oral, sueno a prostituta llamando oral, pero bueno, nunca me ha gustado mucho chuparle la pija a un tipo, pero si a una le lamen el clítoris, no se puede andar haciendo la remilgada.
Después tuvimos sexo del más convencional obviamente, y fue lindo, nada del otro mundo, pero estuvo bien.
Lo que más me gustó es dormir con alguien, no sé, hacia tanto que no lo hacia que fue como un sueño hecho realidad, obvio estaba tan feliz, que ni pensé que en que se tiene menos espacio en la cama, y otras varias cosas desafortunadas que tiene el dormir con otro. 
Me levante antes que él, y le prepare el desayuno, eso le encanto, pero después de tomar el café, y comer las tostadas untadas en manteca y mermelada, no se ofreció a la lavar ni una taza, ni siquiera a pasar las manos para barrer las migas de las sabanas.
Pero esos detalles los obvie en su momento.
Después de esa vez, día por medio se quedaba conmigo, cundo le hacia el tiro de que fuéramos a su depa, se hacia el boludo y empezaba con excusas, no que es muy chico, que es muy feo, que muy viejo, le faltaba poco para describirme una cueva.
Al mes más o menos del ir y venir, le ofrecí una llave, la verdad es que a pesar de que no me ayudaba en nada, me sentía contenida a su lado, en ese momento sentía su autoritarismo y esa cosa de macho dominador, como una forma de protección, ya sé tantas han caído en eso, y las que seguirán cayendo.
Poco a poco me fui transformando, empece a cambiar mis comidas, por las que le gustaban a él, que eran más al horno o hervidas, que fritas, también más vegetales o pastas, que carne o pollo, los pocos muebles que tenia, los cambió de lugar.
Me registro en un gimnasio, no el mismo al que iba él, porque según me dijo, mese era solo para hombres, y yo le creí, valga la redundancia.
Como quién no quiere la cosa, también me sugirió que me tierra un color más claro, castaño ceniza, tirando a rubio, que usará ropa más atrevida, zapatos con tacos más altos.
-Los colores claros, siempre benefician la cara, mi amor.
-No quiero ser otra morocha arrepentida.
-Créeme, te queda mejor, dame el gusto, dale. 
Y yo lo hacia, siempre terminaba cediendo.

sábado, 7 de agosto de 2021

Aventura /3)

Levitaba, al llegar al ascensor tenía ganas de gritar de felicidad, y una sonrisa de oreja a oreja.  Al llegar a mi depa tenía una emoción incontrolable, como una adolescenteme puse los auriculares y empecé a escuchar canciones cursis, alegres, bailables.
Estaba tan entusiasmada, que apenas pegue el ojo.
Ni bien me levante, me puse a tararear una canción de Palito Ortega, la felicidad.
Ahora la verdad que todo eso me provoca sentimientos encontrados, por un lado cuando uno cree ser feliz, hace todas las ridiculeces posibles, y se siente impune cometiéndolas, pero luego cuando esa sensación pasa, uno no sabe dónde esconder la cabeza, o mejor dicho los recuerdos, pero tenía que hacerlo, no solo como se dice para no caer en los mismos errores, sino para...todavía no estoy segura de para que.
Todo ese día, estuve de un humor bipolar, por un lado alegre y por el otro ansiosa de que no me llamara o mandara un Whatsapp.
A la tarde, la sonrisa se me había transformado en una cara de culo bárbara.Justo cuando estaba agarrando la cartera, para irme a casa, para llorar y putearlo en voz baja, me llamó.
-Mi amor, perdóname, es que el celular se me calló y no anduvo, tuve que comprar otro, ponerle la batería, ya sabes, un embole.
Enseguida le creí, después cuando nos vimos le pedí el celular para comprobarlo, era otro, no iba a inventar una mentira que se fuera a caer enseguida, supongo que lo hizo para oír mi tono de voz, y si era como esperaba, estaba enojada, no preocupada de lo que le podría haber pasado, ya a ese nivel de estupidez y sumisión no había llegado.
Cuando nos vimos, me esperaba con 1 rosa, no un ramo, ya me había calado, sabía que si se aparecía con un ramo, me iba a parecer algo increíblemente cursi, e iba a empezar a sospechar que lo del celular era una mentira, y que si me había mentido sobre eso, era porque algo quería tapar.
Tome la rosa, y la olí, si, más cliché imposible, nuestro romance fue todo un folletín.
Me invitó a cenar, en una pizzeria, me pareció perfecto, ya que no tenía ganas de ir al depa a cambiarme, maquillarme y salir de vuelta, además se iba a hacer muy tarde, odio cenar tarde.
De vuelta le dije que pasará, la verdad no tanto porque me enloqueciera acostarme con él, sino para que si tenia a otra por ahí, cagarle la noche, ya sé, una idiota, un tipo si tiene otra, no vale nada, pero en ese momento no sé qué me agarro, y quería competir contra alguien, sin saber que obviamente, lo estaba haciendo contra mí misma.

sábado, 31 de julio de 2021

Aventura /2)

 El bar que eligió era lindo, elegante, pero a la vez discreto, las mesas estaban bastante alejadas unas de otras, por lo que daba cierta intimidad.
También en el bar, me corrió la silla, y en ese momento, hasta me empezó a gustar, si así de contradictoria era, le sonríe, agradeciéndole el gesto.
-Qué querés tomar?
-No sé, un te?
Pidió un te y un café.
Mientras cada uno revolvía el contenido de la taza, nos quedamos ahí sin saber qué decir, bah por lo menos yo, creo qué él si sabia qué diría, cuando y como, Ernesto es de esas personas que todo lo calculan.
-¿Hace mucho qué trabajas en el estudio?
-Un montón, 5 años ya.
-¿Y te gusta?
-Si, es un buen trabajo, un lugar cómodo, con aire condicionado, mis jefes de esos insoportables e histéricos, al contrario.
-Si, son buena gente los Puig.
-¿Ni hablar, y vos a qué te dedicas?
-Soy financista, pero no de esos que dan en negocios turbios, y terminan desaparecidos o con un tiro en la cabeza.
Ambos reímos, su risa era contagiosa, y si luego descubrí que era honesto en su trabajo, todo lo turbio lo guardaba para su vida privada, sobre todo para las infelices como yo, que eran lo bastante estúpidas como para hacerle caso.
Luego como quién no quiere la cosa, siguió dirigiendo la charla, que se convirtió casi en un cuestionario, aunque yo en ese momento andaba en las nubes, contenta que él se interesará en mí.
Me preguntó sobre mi familia, si mis padres vivían, si tenia hermanos, si ellos vivían en Capital, ahora veo por qué.
Después de los cafés, me ofreció invitarme a cenar, pero le dije que no, ya que tenia miedo de cansarlo, nunca he sido muy conversadora, y menos si se trata de hablar de mí, ya que me da cosa hacerlo, porque básicamente me han pasado muy pocas cosas dignas de ser contadas.
Al llegar a la puerta del edificio donde vivía, nos despedimos, en la típica escena de falso beso en la mejilla, que termina dándose en los labios.



sábado, 24 de julio de 2021

Aventura /1)

Con qué poco una mujer como yo se hace ilusiones, tal vez hago mal en meterme a un colectivo, si es verdad que hay otras iguales o peores, pero conformarme con no ser la única idiota masoquista a la que le ha pasó, no deja de ser un consuelo de tontos.
Cuando lo vi, me sorprendió que me dijera más de las 4 o 5 palabras absolutamente necesarias, que me dirigían las personas que iban a ver a los 2 abogados de los que yo era secretaria, ni siquiera ellos, mis jefes, eran de tener intercambios mucho más largos conmigo, ni nadie en general, soy una persona que no genera empatia, y es algo reciproco, ya que me reconozco apática. No sé por qué estoy retrasando tanto las cosas, y describiéndome a mí misma, como si no me conociera, quizás es una forma de justificarme, la manera tan idiota que tuve de actuar posteriormente. 
En fin, lo conocí ese día, no era un hombre atractivo, en el sentido convencional del termino, apenas tenia 30 años, y una más que insipiente calvicie, sus labios eran muy finos, sus ojos insulsos, lo más "lindo" de su cara era su nariz, pequeña bien formada. Lo mejor de él, era su voz, cautivadora, por lo menos para mí, viril, envolvente, qué cursi me siento escribiendo así, pero no hay otra forma de relatar lo que me provocó Ernesto, en ese momento.
No me dijo mucho cuando nos vimos por primera vez, me preguntó lo obvio, si podía pasar a ver a uno de mis jefes, que tenia una cita con él, etc, pero la forma en que lo dijo, y su lenguaje corporal, me hicieron temblar.
Como dije, debe haber sido, porque nadie desde hacia mucho tiempo me prestaba la más mínima atención, ni yo tampoco se la prestaba a nadie, pero a él sí.
Estuve ansiosa hasta que salió de su reunión con mi jefe. Pensaba si me diría algo, si había sido solo cortesía o de verdad le guste, ni idea tenia.
-¿A que hora salís?
Al preguntarme esto, me vi obligada a hacer contacto visual, ya que cuando abrieron la puerta, había bajado la vista, para que no notara que estaba roja.
-A las 6...
- ¿Te gustaría salir a tomar un café?
-Bueno...
Una vez que se fue, yo me levanté y corrí hasta el baño, allí me vi, mi aspecto, insulso como siempre, era también una cualidad, ya que una pollera negra hasta las rodillas, medias de nailon, zapatos de taco bajo negro, camisa blanca, y chaqueta negra, era un atuendo clásico, y para un cuerpo como el mío, flaca, pero sin nada a destacar, ni buenas tetas, ni buen culo, un poco las piernas, pero nada del otro mundo, mi vestimenta estaba bien.
A la hora de salir, fui de vuelta al baño, me pinte los labios y me maquille un poquito, ya que si no iba a ser muy obvia las expectativas que ponía en esta cita.
Cuando salí del edificio, me estaba esperando en la puerta.
Fuimos hasta su auto, me abrió la puerta del mismo, ese gesto me pareció medio tonto, nunca me ha gustado la caballerosidad exagerada, pero bueno, eso era mejor que nada y hacia rato que yo no tenia ni un perro que me ladre.



sábado, 3 de julio de 2021

Voces /9)

Apenas se dio cuenta por un pinchazo el momento en que otro de los presos le clavó un objeto punzante en la carótida, se desvaneció y murió a los pocos minutos. 

sábado, 26 de junio de 2021

Voces /8)

Mientras sus hijos crecían esperaba que se manifestara alguna tendencia que los hiciera parecidos a él, pero no, por lo menos no encontró ninguna evidente, los veía similares a su madre en todo sentido.
Son corderos, pensó.
No tenía consciencia de su propia debilidad, ese era el privilegio suyo por sobre ellos y toda la gente "normal", que vivía desprevenida, creyendo que todos eran como ellos.
Pobres idiotas, ahora consideraba que lo tendría que haber hecho antes, como una forma de misericordia. 

sábado, 19 de junio de 2021

Voces /7)

Lo fue a ver un psiquiatra, él le contestó generalidades a sus preguntas, cuando no monosílabos. 
Pensó que hubiera sido mejor vivir 200 o 300 años atrás, seguramente ya lo hubieran ahorcado, no hecho todo lo que consideraba una farsa civilizada. Los seres humanos seguían siendo bestias, no había descubierto nada, lo sabia desde lo poco que leyera en la adolescencia sobre la condición humana cuando intentaba entenderse y buscarle una explicación a sus pensamientos. Por qué las víboras tienen veneno a diferencia del resto de los animales, no tenia explicación, eran así, como eran así los criminales como él, por qué había psicópatas porque los había, punto.

sábado, 12 de junio de 2021

Voces /6)

 Lo tuvieron que poner en una celda en solitario porque su compañero de celda lo había querido matar sin que él apenas le dirigiera la palabra. No lo sorprendía, estaba casi seguro de que uno de los presos tarde o temprano lo matarían, solo esperaba que fuera rápido.
Escuchar a su abogado lo aburría, a pesar de ser el único además de los agentes penitenciarios
 que le dirigían las mismas ordenes todos los días, aunque prefería a estos que a su abogado, no quería escuchar sus palabras, sus estrategias, la tercera vez que lo vio le dijo que hiciera lo que quisiera pero que no lo fuera a ver, ni le pidiera nada si no quería que lo despidiera y buscara otro abogado.
Solo quería oír el silencio, porque sus pensamientos ya no llegaban a través de palabras, sino a través de imágenes. Las imágenes ahora lo reconfortaban, de una forma extraña, como el alivio que se siente después de vomitar. 

sábado, 5 de junio de 2021

Voces /5)

 Su abogado decidió alegar demencia, a él no le importaba en lo más mínimo, pasar años en una cárcel o en un manicomio, en teoría seguramente el manicomio era mejor opción, lo sabia pero en el fondo en una u otra tendría que vivir con lo que había hecho. Después pesó que en el manicomio probablemente lo llenarían de pastillas y la idea le gustó, no pensar, pesar, era eso lo que había hecho, tenia otra ida de lo que era pensar, no, no, lo que hacia era escuchar, escuchar y ver cosas todo el tiempo,  imaginar asesinatos, hechos horribles, eso le atraía y perturbaba. Era como mirar un abismo, la tentación de lanzarse, ese deseo de hacer algo horrible era lo único que le provocaba algo dentro, el resto era nada, letargo, rutina, hacer las cosas por inercia y mecánica. La fragilidad y belleza de esas criaturas solo le despertaba pensamientos perversos, voces, alucinaciones, cuerpos rotos, sangre, huesos, todo lo lindo convertido en pedazos de carne muerta. 

sábado, 29 de mayo de 2021

Voces /4)

Su esposa, se habían conocido durante un viaje en colectivo de regreso de Mar del Plata, no hablaron tanto, nunca lo harían, eran personas calladas que se tragaban todo, quizás por eso decidieron verse de nuevo, para volver a hablar poco, intercambiar miradas y al final de la cita darse un beso, pequeño, seco, anodino, como también lo serían el resto de las citas, encuentro, la primera vez que estuvieran juntos, todo en ellos se desarrollaría de una forma sosa.
Tuvieron hijos sin proponérselo, Noelia quedó embarazada porque él se había puesto mal el preservativo, medio dormido y apurado.
Nacieron mellizos, una nena y un varón. Luis no sintió nada por ellos, lo asustó eso, terminó de tomar consciencia de sí mismo, de entender que no era una persona normal.
Durante unas semanas le costó dormir, tenia pesadillas y no quería acercarse a sus hijos, hasta que lo fue asimilando, podía fingir, era fácil, todos querían que fuera real su amor paternal, por lo que cuando sostenía a sus hijos, o cambiaba a uno si su esposa le estaba dando de mama o bañando al otro, era algo admirable, de hecho todos destacaban lo habilidoso que era, jamás se ponía nervioso al sostenerlos, no sabían que era porque no le importaba en absoluto si se le caían. 

sábado, 22 de mayo de 2021

Voces /3)

 Si, hubo un detonante, pero no fue el motivo por el cuál cometió los asesinatos, no era el primer hombre en enterarse de algo así y no sería el último, sin embargo la mayoría no habría hecho lo que él. No, la idea de matar era algo que siempre la había rondado en la cabeza, desde chico, había matado innumerables animales, se había auto-asfixiado y hecho cortes en los talones, de paso no había conseguido sentir algo genuino por ningún miembro de su familia, lo había intentado, pero ni siquiera ahora que reflexionaba sentía que había querido a su madre. Ahora que le sobraba el tiempo para pensar y recordar, no había sufrido realmente por la muerte de su madre, ni tampoco antes cuando gradualmente se fue volviendo esquelética, ojerosa y demacrada por el cáncer, en sus sueños a veces se imaginaba abriéndola para ver qué era lo que le provocaba eso. Tampoco a su padre había querido, ni a sus hermanos, su relación con cualquier miembro de su familia había sido en apariencia normal, porque en el fondo no le importaban en lo absoluto, podía relacionarse con ellos, fingir, si, fingía que le importaba que su hermana o la atropellara un auto cuando cruzaba la calle, o que de más grande no sufriera ningún tipo de violencia callejera o en sus relaciones de pareja, pero en realidad le daba lo mismo, igual su hermano mayor. Lo mismo podía decir que su mujer, ya todos habrían investigado y quien sabe si no sabrían la verdad, tal vez en ese momento se estaban dando grandes debates sobre ella y sobre él. Si supieran que sus más de 20 años juntos había sido de lo más anodinos. 

sábado, 15 de mayo de 2021

Voces /2)

Pelo cano, con motas negras, ojos grandes, pardos, mejillas pulcramente afeitada, nariz pequeña, frente ancha, barbilla pronunciada, era lo único destacable en un rostro que era del tipo que se olvida al instante de verlo, ya que nada en el llama la atención, ni por belleza, ni por fealdad, que no inspira tampoco simpatía o rechazo, ni gracia, ni tristeza, solo indiferencia. 
Con esta cara podría haber sido cualquier cosa, la gente no sabe lo agraciada que somos las personas de cara insulsa, de esas que se prestan a pasarlas de largo, a pesar de que ahora debo ser una especie de viral, como decía mi hija, y quién sabe las veces que mi foto debe haber dado vueltas por millones de pantallas de computadoras, celulares y televisores, e igual si ahora saliera me bastaría ponerme una gorra, y/o raparme, para que nadie me reconociera.Pensaba en esto, mientras oía preguntas, y los flashes de las diferentes fotos tomadas por la policía a su rostro. 
Un abogado al que a veces había visto dando notas en televisión, le había ofrecido sus servicios, y él los había aceptado, aunque si este se creía que sería la estrella del caso, se equivocaba, y él se encargaría de demostrárselo, además de que perdiera el caso, pero de la forma más patética.

 

sábado, 8 de mayo de 2021

Voces /1)

Por varios días no se hablo de otra cosa, los diarios, noticieros, incluso los programas de espectáculos, no comentaban más que los asesinatos cometidos por Luis Antonio Almonte. 
Nadie entendía como ese hombre menudo, de apariencia y carácter insulso, que tenia una panadería en una ciudad pequeña del interior de la provincia de Buenos Aires, había abierto fuego contra toda su familia, el día de su cumpleaños número 50.
-Todavía no puedo creerlo, yo le compraba pan todos los días.
-Era un hombre muy tranquilo, y amable, incluso solidario, quién iba a saber que escondía un muestro adentro.
-La verdad, con esa cara de infeliz, nadie pensaría mal, che querido, no vayas a poner mi nombre, eh, porque como es la justicia en este país, nunca se sabe cuando lo largan.
La historia tenia algo, que por más que se hablara una y otra vez de los mismos detalles, se pasaran las mismas fotos de los diferentes fallecidos y del asesino, la gente seguía consumiéndolo, dejando la televisión prendida en el canal donde hablaban de eso, armándose grandes debates, que iban desde la psicología de un psicópata, hasta las posibles reformas en el código penal.

sábado, 1 de mayo de 2021

El oficio de Manuel (32)

 Siguió plomería, solo porque no entendía nada de electricidad y el de gasista llevaba demasiado tiempo, además a ambos los consideraba peligrosos. Cuando empezó a usar el mameluco de plomero se carcajeó, y tardó un tiempo en tomárselo en serio, después miró su panza, su barba desprolija, su pelo poco pelo desde que dejara los productos para detener la calvicie y se dejó que era el cliché del plomero.
Igual el trabajo lo cansó rápido, era agotador, llevaba mucho tiempo, además de que siempre estaba sucio, mojado o pegoteado. 
Un día al terminar de arreglar un inodoro y sobre la mesa de luz de la habitación de su cliente una pipa de mariguana y pensó en dedicarse a eso.
Buscó información sobre los diferentes tipos de plantas, como mantenerla para que no se secara y también luego molerla y preparar los porros. Decidió dedicarse a eso, era un trabajo sencillo, limpio, que no requería ningún esfuerzo. Igual los clientes, eran en general gente tranquila, de los alrededores de su barrio. 
Ganaba bien y lo mantenía reducido, no pasaba los 20 clientes, no quería levantar la perdiz.
Uno de sus clientes que lo había sido también en sus tiempos de prostituto le dijo con sorna:
-Nunca un trabajo digno, vos.
A lo que Manuel contestó: Los tuve, me fue como el culo. 




sábado, 24 de abril de 2021

El oficio de Manuel /31)

Sabía que era un pasó atrás, que no podía seguir siendo prostituto por mucho tiempo más, que cada vez tendría menos clientes y por menos plata, que todos los días aparecían chicos más jóvenes, atractivos, dispuestos que él. Pero no encontraba a qué dedicarse, qué hacer por fuera de la prostitución. Decidió dejar de preocuparse, la vida se encargaría de eso.
Los clientes empezaron a ser cada vez menos, y decidió dejar la prostitución por segunda vez, sabiendo que sería la definitiva porque tampoco nadie le iba a pagar por acostarse con él.
Pasó días durmiendo mal pero saliendo poco y nada de la cama, solo para ir al baño, ducharse, tomar algo o prepararse un huevo revuelto. La barba se le creció, volvió a perder su masa muscular, ojeroso. Decidió anotarse en un programa para adultos del gobierno. 

sábado, 17 de abril de 2021

El oficio de Manuel /30)

Decidió cerrar. Consideraba que era mucho trabajo para poco dinero, además él tener que sacar cuentas y estar pendiente de tantos aspectos lo agotaba, consideraba que no valía la pena.
Cuando sacó la cuenta después de pagar los despidos, y vender todos los muebles y utensilios no le quedó más que un resto para ir tirando por un mes.
No quería buscarse otro trabajo y decidió abrir Grindr, y esperar a ver si le llegaba alguna oferta. 
La recibió, volver a arreglarse para ver a un cliente le resultó natural, el desodorante, perfume, la ropa.
Besar, tocar, y coger a alguien por plata, durante el tiempo que había tenido el bar restauran solo tuvo sexo en dos ocasiones, uno fue una chupada que le dio un muchacho de 20 años y otro de su edad. No disfrutó ninguno de los dos, solo fueron descargas, formas de acabar diferentes a una paja. Disfrutó este encuentro, no porque el cliente fuera particularmente agradable o interesante, ni tampoco lograra tener química física con él, sino por volverse a sentir deseado y recompensado por ello. 

sábado, 10 de abril de 2021

El oficio de Manuel /29)

Igual ahora estoy más para pagar que para que me paguen. Se sintió fofo, avejentado, y decidió recuperar su cuerpo, aunque sea quitándose una hora de descanso. Se anotó en un gimnasio que quedaba a medio camino entre su departamento y el bar, iba a la mañana.
También empezó a teñirse, y usar productos para no perder cabello.
No dejaba de sentirse extraño en su oficina, viendo planillas de Excel para analizar los costos, siempre con una camisa de color pastel, celeste, blanca o salmón, y pantalones negros o beige. Se sentía grotesco, en un trabajo que era aburrido y demandante a la vez. Quería cerrarlo pero no sabía a qué dedicarse después y tampoco tenía mucho dinero ahorrado, apenas para vivir un mes, el bar le dejaba mucho menos plata que la prostitución y eso que gastaba mucho menos que antes, se compraba menos ropa, ningún perfume, no se iba a ningún lado de vacaciones, su vida era mucho más austera.


sábado, 3 de abril de 2021

El oficio de Manuel /28)

Llevar la contabilidad, hacer pedidos, abrir y cerrar, supervisar todo el tiempo cada cosa lo abrumaba. Una vez que se fue acostumbrando a eso y a dormir con suerte 7 horas por día, lo empezó a fastidiar la rutina, todo era igual, y se pasaba el día hablando con proveedores y sacando cuentas.
Le empezaron a salir canas, dejó de ir al gimnasio porque no hacia tiempo e incluso llegó a engordar 5 kilos. Un día feriado que había decidido cerrar porque no le cerraban las cuentas tenerlo abierto cuando iba a tener pocos clientes, decidió mirarse y se sintió y vio feo y envejecido.
Si sigo así dentro de un año voy a parecer de 50, encima todavía no saco lo mismo que ganaba como prosti.
Tener gente a cargo lo abrumaba, y las veces que no estaba ocupado, se sentía ansioso o aburrido, o fastidiado, ni él sabia muy bien qué había esperado de esa nueva vida pero no era lo que estaba obteniendo. 


sábado, 27 de marzo de 2021

El oficio de Manuel /27)

Una vez elegido el lugar Manuel y Daniel contrataron un diseñador de interiores que junto con sus opiniones decidió el color de las paredes, el tipo de muebles que irían en el lugar.
Manuel se repetía a sí mismo que se lo tenía que creer que era la única forma de que pudiera lograrlo.
Pasó semanas donde apenas durmió ya que estuvo hablando con decoradores, albañiles, carpinteros, vidrieros, de paso contratando gente para bacheros, mozos, cocineros, etc.
El día de la inauguración no pudo dormir, incluso tuvo que ir al hospital para que le inyectaran una buscapina porque no aguantaba el dolor de estomago.
-Tranquilo, el primer día es solo una fantasía, para bien y para mal.
Le dijo Daniel palmeándole la espalda.
Y se llenó, aunque si, sabía que eso era muy común en las inauguraciones, hasta los kioscos de la villa se hacían cola para entrar a chusmear. La gente sacaba ese ansia por algo nuevo, aunque solo fuera un kiosco de 3 x 3.
Al día siguiente los clientes fueron la mitad, menos al tercero, al cuarto se empezaron a estabilizar. 

sábado, 20 de marzo de 2021

El oficio de Manuel /26)

Empezó a ver locales, la mayoría le gustaban pero eran caros y no podía sacar crédito. Manuel estaba inscrito como monotributista, pero ahora si quería tener un negocio tendría que ser mucho más especifico, algo imposible en sus circunstancias por ende si o si necesitaba un socio.
Le inventó a su jefe que había cobrado una herencia y si él podía no conocía a alguien con quien pudiera asociarse. Este le dijo que él lo estaba, y empezaron a hacer cuentas. Se sentía extraño compartiendo, era algo nuevo para él. 
Se preguntaba si serviría de algo esto, si no sería inútil y estúpido intentar abrir un bar restauran sin tener experiencia en ese sentido, si no perdería sus ahorros, pero se dijo que prefería hacerlo ahora cuando todavía era joven y podía recuperar la plata con nuevos clientes, que a los 45.
David le dio varios consejos, le recomendó zonas de la ciudad, juntos buscaron agencias inmobiliarias y calcularon precios, decidieron visitar los 3 que más les llamaron la atención. Mauel decidió escuchar y aprobar todo lo que dijera David, este le terminó diciendo:
-Manuel, vamos a ser socios, no me podes decir a todo que si, dame tu opinión.
-Pero es que vos sos quien tiene experiencia.
-Si, pero vos también pones la plata, y te tiene que gustar sobre todo a vos, es tu emprendimiento, yo te acompaño, pero es tu sueño, así que ahí no puedo meter mano yo.
-Bueno, a mí me gusto mucho el segundo que vimos.
-Buena opción, no hay tantos lugares en ese barrio, es bastante seguro, te apoyo.
Manuel se sintió reconfortado, le gustaba saber que Daniel aprobaba lo que hacia. 



sábado, 13 de marzo de 2021

El oficio de Manuel /25)

 Los viejos le rondaban la cabeza, cada día eran más, y en general estaban solos, la mayoría por lo menos en CABA tenía un pasar económico aceptable, podía darse sus gustos. Si abría un restaurante teniendo en cuenta esto, que no fuera exclusivo para ellos pero si donde se sintieran cómodos, con mozos dispuestos a escucharlos, darles charla, leerles el menú, etc.
Se pasó la mañana anotando cosas para su proyecto.
Luego hizo un Excel con la lista.
Se sentía extraño, casi ridículo, recordó una palabra que usaba mucho uno de sus clientes, aburguesado, y cuando le había pedido la definición este le dijo: es básicamente cambiar de piel, por una mujer, ponele, pero a la que nunca sentís del todo propia, como te digo, como si fuera alquilada. Hacia años que este hombre se la había dicho y del cuál ya no se acordaba de su nombre, pero si la palabra, porque así se sentía, igual siendo prostituto, aunque eso sí le parecía que era algo que se esperaba de él por venir de donde venía, y sintió orgullo de intentar cambiar, no porque le jodiera ser prostituto, sino porque convertirse e el dueño de una pyme lo hacia destacar, ser mejor que los demás de la villa. Siempre se había sentido perseguido por venir de ahí, estigmatizado, aunque nadie que lo conociera, bah las pocas personas además de sus clientes con las que tenia trato, algunas ex parejas, nunca les había mencionado donde se había criado, siempre les inventaba que en el interior de la provincia, en general usaba Lobos, porque una vez camino a Mar del Plata el colectivo en que iba se había roto y tuvieron que esperar unas horas en su terminal, decidió recorrer un poco de la ciudad y le gustó, decidió que ahí situaría su infancia, se inventó una madre, un padre y dos hermanos, con los que iba a la plaza, y se sacaba fotos frente a sus estatuas.
Quizás dejara de usar esa mentira una vez que abriera el bar restaurante, quizás podría ser una de esas historias cursis de nací en una villa y salí adelante, un verdadero ejemplo de meritocracia, aunque solo diría villana, no en cuál, ni mucho menos volvería a usar su verdadero apellido que se había cambiado ni bien llegó a la mayoría de edad.  Pero no, mejor no hacerse el canchero, si hablaba de su origen aunque fueran vaguedades, alguno podía asociarlo con su familia, y quewría que estos siguieran enterrados. 

sábado, 6 de marzo de 2021

El oficio de Manuel /24)

Limitó sus encuentros a los fines de semanas. Mientras veía como funcionaba un restaurante y se ganaba la confianza de su jefe para más adelante preguntarle cosas sobre el negocio e invertir sus ahorros en uno.
A veces lo estresaba pensar en un posible negocio y lo invadían pensamientos negativos, creía que se iba a quedar sin plata y tendría que volver a prostituirse por menos de lo que lo hacía, eso era lo que le jodía, no coger, coger le daba lo mismo pero ganar menos por hacerlo si lo sentía degradante.
Aceptó el ofrecimiento de su jefe de ser mozo, era el mismo sueldo que de bachero pero además tenia propinas, le daban muy buenas, ya que sabía ser agradable y su atractivo de por si predisponía de forma positiva a la mayoría. Las señoras a veces le dejaban mejor propina de lo que ganaba en todo un día de trabajo, igual los hombres gays que a veces iban, se sentía agradecidos con su amabilidad y coquetería. En general la gente mayor era la que más agradecía el bue trato, sus sonrisas, miradas y algún que otro comentario gracioso.



sábado, 27 de febrero de 2021

El oficio de Manuel /23)

 Volver a su departamento cuando pasaba más de u día afuera le generaba algo raro, era como reencontrarse consigo mismo, sus olores, volver a ser él.
Cada vez se sentía más encerrado cuando regresaba, como si su propia personalidad lo asfixiara. Ni bien entraba volvían sus pensamientos, ideas negativas, frustraciones, deseos de cambio que él mismo rompía.
Se dijo que ese día haría una prueba, armó un C.V online, fue hasta una polirubro para que se lo imprimieran y le hicieran copias.
No decía mucho, sus estudios: primario y secundarios.
Lo ofreció en puestos vacantes de bachero, repositor, ayudante de cocina.
El dueño del restaurante que pedía un bachero le dijo si no quería repartir volantes, que si estaba ahí dos horas, sería menos tiempo de bachero, y él aceptó.
Sabia que lo elegía por su apariencia, era otra vez vivir de su físico aunque de otra manera, pero no le jodía.
Al primer mes notó que sus ingresos no llegaban ni a un cuarto de lo que hacia como prostituto. También que trabajaba muchas más horas, y tenia que seguir ordenes.
Sus compañeros de trabajo eran gente tranquila, una cocinera muy limpia y unos mozos bastante dicharacheros, sabia que a una de las chicas le gustaba y que el mozo más joven le tenía envidia, pero más que echarle malas miradas no hacía.
Si quería seguir viviendo en ese departamento iba a tener que empezar a gastar de sus ahorros, ya que lo que ganaba como bachero y repartidor de volantes apenas le alcanzaba para el alquiler.
Necesitaría por lo menos tener dos clientes por semana. Pensó que su rutina se parecería a una mala comedia: Bachero de día y prostituto de noche. 



sábado, 20 de febrero de 2021

El oficio de Manuel /22)

El domingo lo despertó el olor del humo, no era en la quita de Jorge, sino en la vecina, que si bien no estaba muy cerca el viento hacia que llegara hasta la suya.
Si, eso es lo peor de las quintas, todos los domingos el puto asado, una de las cosas que más me alegran de haberme ido del país es no tener que escuchar hablar del asado, allá comen carne pero en parrillas a gas y no le dan ni 5 de pelota a eso, peor bueno acá so así.
Manuel recordó que a veces cuando la situación no era tan mala y si la pareja de su madre le gustaba asar, tenían una parrilla que colocaban en el patio diminuto donde apenas entraba la chapa, la bolsa con el carbón y la parrilla. 
La carne siempre estaba mal hecha, quemada por fuera y cruda por dentro.
-Yo tampoco entiendo la fascinación de este país por el asado.
-Como el fútbol, estupideces.
Jorge pidió empanadas, comieron en silencio y después vieron una película.


sábado, 13 de febrero de 2021

El oficio de Manuel /21)

En general no aceptaba a nadie que viviera fuera de Capital, pero Jorge le había ofrecido 1000 dolares por pasar el fin de semana con él en su casa quinta en Pilar.
Hacia años que no salía de la ciudad, muy pocas veces de adolescente lo había hecho, no le gustaba, le parecía una zona gris, llena de contrastes, mal formada.
Igual por donde donde el trayecto hacia Pilar no era feo, de hecho pasaron por las zonas más lindas del conurbano.
Se encontró con una casa quinta mediana, a diferencias de otras que habían pasado esta no era de ladrillos a la vista, si no pintada de color crema, el techo era de tejas verdes.

-Yo en si vine al país hacer unos papeles y ya me voy a la mierda de acá, llevo 10 años viviendo en Miami, cuando pueda vendo esto, pasa que ahora quien te paga mínimo lo que me costó construirla, tampoco la voy a regalar.
¿Querés tomar algo?
-Lo que tomes vos.
-A ver...dos mojitos, ya los preparo, vos si querés anda a cambiarte, ponete el short y métete en la pile.
Lo decía como una sugerencia pero Manuel sabia que era una orden, así lo hizo. A él no le gustaba la pileta, le resultaba aburrido pasarse horas dentro de u cubo grande, no entendía la fascinación de la gente por eso, menos desde que existía el aire acondicionado.
Se metió, no quería zambullirse por lo que agarró uno de los flotadores con forma de cisne que había.
Jorge le sirvió el mojito, tampoco le gustaban ese tipo de tragos, pero lo tomó.
Jorge se puso bloqueador, le preguntó a Manuel si se había puesto y este le dijo que si.
Después antes de meterse a la pileta se armó un cigarrillo de tabaco, le ofreció uno a Manuel, este lo rechazó, en su perfil aclaraba que no fumaba.
-Hermoso lugar.
-Viste, si, el diseñador hizo algo como la gente, igual le rechacé dos propuestas que quería hacer u diseño raro y le dije: No, yo quiero una casa quinta, puto, no arte. Después a quien le vendes una casa quinta que parece otra cosa. 
-Entiendo.
Siempre que no sabia qué contestar decía eso.
Pasaron más o menos 1 hora en la pileta. Jorge se levantó, se secó y le dijo a Manuel que lo acompañara. Tuvieron sexo, Manuel fue el pasivo, Jorge era buen amante y no tuvo que mentalizarse y pensar en actores pornos para estar con él, tenia un muy buen cuerpo para su edad, 53 años, se notaba que hacia ejercicio y se cuidaba con las comidas. 
Una vez que acabaron se quedaron los dos recostados durante media hora, luego Jorge fue a bañarse, cuando este terminó, lo hizo Manuel. 
-Che, no me lo vas a creer pero me gustó.
-Por qué no te lo voy a creer, porque se lo dirás a todos los tipos, nah, ya sé que no tenés necesidad, creo no dar la imagen de ser tan inseguro como para que me tengas que decir algo así.
-Ja, en general no se lo digo porque no me van a creer, y con razón, a vos si porque la pase bien.
-Gracias, yo también con vos, eh, sos muy bueno, y muy estrecho, me imagino que todos casi todos te piden ser activo.
-Ajá.
-Yo soy versátil pero más activo, mucho más, aunque he dado el culo algunas veces, pero ya me estoy mentalizado a que cuando no se me pare más, me vuelvo pasivo, porque Viagra no voy a tomar.







sábado, 6 de febrero de 2021

El oficio de Manuel /20)

 Para recuperar su masa muscular frecuentó el gimnasio un par de veces más de lo que lo hacia antes de quebrarse. Le gustaba ese en particular porque al horario que iba, en general cerca de la medianoche casi más estaba y los pocos que había se concentraban en lo suyo, nadie buscaba conversación.
Cuando vio a su cuerpo más o menos igual que antes de la quebradura se sintió extraño, no por eso, sino porque le provocó angustia saber que ese físico no le duraría más de 5 o como mucho 10 años, su piel se empezaría a ver más flácida y sus músculos perderían volumen.
No pasaban muchos días sin que le entrara esa angustia, qué hacer, como seguir, cuando terminar con esto, y hacer qué después, siempre terminaba anulando todas las salidas que se le venían a la mente y dándose excusas para continuar como estaba.



sábado, 30 de enero de 2021

El oficio de Manuel /19)

Pasaban los días, los clientes, con su intercambio de besos, saliva, caricias, preservativos, billetes. Ojos, bocas, caras, voces, que no recordaría, que solo significaban un nombre que a veces agendaba en su celular, una dirección.
Una noche que volvía de una de sus citas, se tropezó con la raíz de un árbol y cayó sobre su brazo derecho, se lo quebró, tuvo que estar un mes enyesado. Podía no trabajar ese lapso pero decidió hacer una prueba, subió su foto con el yeso y dijo que lo tendría por 1 mes, le empezaron a llegar ofertas extrañas, uno le dijo que le pagaba pero solo por lamer el yeso, otro por chuparle los dedos, también algunos por olerlo o refregarse contra este y acabar sobre el mismo, lo último no lo aceptó porque lo consideró anti higiénico y peligroso para la sanación de su brazo, tenia miedo de hacer un mal movimiento y tener que prolongar su recuperación.
También recibió varios clientes que si querían tener sexo y le confesaron que lo hacían porque de adolescentes cuando alguno de sus amigos estuvo enyesado tuvieron su primera experiencia sexual masturbándolos o practicándoles sexo oral.
Uno de los mensajes más perturbadores que recibió era un tipo que le ofrecía 100.000 pesos si se quebraba el otro brazo, porque tenia la fantasía de tener sexo con alguien con los 2 brazos enyesados. Lo bloqueó.
Durante ese mes Manuel puteó varias veces porque le costaba manipular las cosas con el brazo izquierdo, se le cayeron varias tasas, platos y fuentes hasta que empezó a pedir online cada vez que quería comer o tomar algo. Su heladera quedó vacía por casi un mes.
Le costaba dormirse en la posición que requería su brazo.
Cuando el médico se lo sacó, se fueron todos los clientes esporádicos que había hecho.




sábado, 23 de enero de 2021

El oficio de Manuel /18)

 Decidió buscar a Pablo en Facebook, descubrió que estaba casado, tenia 2 hijos, una nena y un varón, era ingeniero electrónico y vivía en Estados Unidos.
Después de ver una de las fotos frente a una típica casa estadounidense, de esas similares a las que salían en las películas, sonriendo al lado de su mujer y sus hijos, parecían un comercial. Se imaginó los días de Pablo en Estados Unidos, seguro hablaba un perfecto ingles, de hecho cuando se mudaron esa era una de las cosas que le había contado, su madre lo había anotado en un instituto de ingles profesional. Buscó a ver si aparecía en una y ahí estaba la señora, se veía mucho mejor que cuando Manuel la conociera 20 años, los años no solo había sido buenos con ella si no que devuelto todo el esfuerzo, hizo click en la foto para ver si tenía la dirección de su face, y sí, lo encontró, la señora también vivía allá, vendía comida, y tenia una casa más pequeña obviamente que la de su hijo pero bonita, con un hermoso jardín que la señora presumía en diferentes fotos.
Sintió alegría por ellos y también envidia, recordaba las horas que pasaba en la casa de Pablo cuando vivían cerca, la señora era agradable, cálida, mucho más de lo que cualquier familiar suyo lo había sido alguna vez, incluso su tono de voz era diferente.
Se imaginó enviándole una solicitud y cuando le preguntara a qué se dedicaba mentirle o decirle la verdad y que el otro le clavara el visto o lo bloqueara. Estaba distanciados tanto física, metal como económicamente, no solo vivía en países diferentes, sino que él sentía que lo hacían en universos distintos. 
Se preguntó si podría haber hecho algo diferente, era algo que se se preguntaba cada vez más seguido, se reprochaba el no tener constancia, ni iniciativa, el refugiarse en una rutina que cada vez lo hacia sentir más inconforme pero a la que no sabia como terminar. 



sábado, 16 de enero de 2021

El oficio de Manuel /17)

Pensó en si alguien lo lloraría cuando muriera, y se dio cuenta que no, sus hermanos como mucho lo comentarían entre ellos, ya no era más que un conocido, alguien del pasado, como ellos lo eran para él. Nunca se había sentido cercano a ninguno, al contrario el compartir la misma miseria, estar a pocos centímetros cuando comía, dormía, se sentaba, se bañaba, siempre alguien cerca, nunca había espacio ni para pensar, ya que hasta en eso se sentía invadido, le costaba abstraerse, odiaba cuando su madre o alguno de sus padrastros le hacia cuidar a sus hermanastros más chicos, o sus hermanas a sus sobrinos, siempre llanto, mocos, pañales sucios, el baño ocupado, recordó cundo dos de sus hermanos se habían cagado a trompadas porque ambos querían ir a cagar, al perdedor le tocó hacerlo en un balde.
No, no sentía cariño, ni tenia recuerdos afectuosos con ningún miembro de su familia. Tampoco tenia amigos, recordaba un par de vecinos con los que había jugado algunas veces de chico, al fútbol aunque era malo, después los juegos típicos, la mancha, la escondida, y a un compañero de colegio que vivía en el limite de la villa, fue lo más cercano a un amigo, era un chico al que defendió más porque el que lo estaba jodiendo le caía mal que por empatía con el chico, pero este se le pegó, a él no le molestó porque el chico si bien el primer día le habló sin parar, después solo aprendió a respetar sus silencios, e incluso le ayudó a comprender algunas tareas. Pablo era hijo de madre soltera, la mujer trabajaba de asistente de enfermera y estudiaba para licenciarse en enfermería y también para extraccionista. Pablo al principio le resultó pesado, pero le gustaba estar en su casa, era una construcción precaria y fea por fuera pero por dentro estaba limpia, ordenada y pintada. Con las semanas y los meses empezó a encariñarse con él, era un chico tranquilo, menos intenso de lo que creía, cuando estaba fortaleciendo el vinculo y convirtiéndose en una amistad, Pablo le contó que su mama había conseguido un mejor trabajo lo que les permitía irse de la villa y vivir en un departamento, lejos de la zona, por lo que también cambiaría de colegio y Manuel supo que muy probablemente no se verían más. Lo hicieron un par de veces pero a ambos se les complicaba. 
Se prometió nunca más abrirse, no quería tener amigos, no quería querer a nadie más que a sí mismo. 



sábado, 9 de enero de 2021

El oficio de Manuel /16)

 Se levantó somnoliento como siempre que tomaba calmantes. Agarró la única olla que tenia, la llenó de hielos, echó un poco de agua fría y zambulló su cabeza adentro.
Después se fue un rato a la terraza y se quedó ahí ahí con la mente en blanco. Cuando se aburrió volvió al departamento a buscar la billetera y salió de vuelta.
Se metió a uno de los pocos bares de ambiente que conocía, no sabia por qué, simplemente necesitaba distraerse y creyó que escuchar a un par de tipos intentando levantarlo, lo despejaría.
Las preguntas típicas, los tics, las miradas, el cambio en el tono de voz, le resultó medio entretenido un rato, incluso a uno se la dejó chupársela en el baño. Una vez que eyaculó, se limpió y se fue del bar.


sábado, 2 de enero de 2021

El oficio de Manuel /15)

Vio la foto de Hugo mientras hacía zapping, era un canal de noticias, y ahí decían que había hallado el cuerpo de un hombre de 45 años que había sido asesinado luego de sufrir varios golpes en la cabeza y asfixia.
Se quedó mirando, según contaba el notero un hombre de 30 años había sido detenido por el hecho, él mismo fue quien llamó a la policía y reportó el crimen, según argumentaba accidental. Manuel apagó el televisor. Se quedó un minuto abstraído. Podría haber sido yo, me salve cagado. Había ido un par de veces más al departamento de Hugo y cada vez pedía más golpes y asfixia, a la tercera decidió no regresar.
Buscaba que alguien lo matara, el cagó hijo de puta no se atrevía a suicidarse, ahora el boludo este va a pasarse un montón de tiempo encerrado, y lo que no le van a hacer en la cárcel.
No quería pensar en que pudo haber sido él, quería olvidarse, distraerse, decidió ir a un parque, no sabía de donde le había venido la idea o por qué, pero sintió ñas ganas, oír ruido, risas, gritos, el sonido de los fierros al moverse.
Se subió a todos los juegos de un parque caro, nunca había ido a uno de chico, le resultó extraño, patético pero le ayudó a no pensar, sintió vértigo, mareo, nauseas. Después se fue a su departamento y se tomó dos clonagin.