sábado, 5 de enero de 2013

Alargada Primavera /2)

Pase más de la mitad de mi vida aquí, 20 años, es raro pensar en tanto tiempo cuando se tiene 40, pero es así, pensar en que este lugar no era nada, bah si una casa, a la que agradamos y transformamos en hotel con Martín, que empuje tenia en ese tiempo, bueno lo sigue teniendo, pero es otro tipo de empuje, que se yo...
Por que no puedo dejar de pensar en Martín, Martín, Martín, basta, mi vida no ha sido más que un apéndice de la suya, me pase 20 años sino una ladera, estando ahí para apoyarlo, nada más, para ser la esposa, la madre de su hija, la señora Nones.
Ahora si que esto es una buena metáfora de mi vida, vació, todo vació, y al igual que Recuerdos en la montaña, nombre elegido por Martín, como todo lo demás, se volverá otro lugar, lo cambian de nombre, y vaya a saber si conservan algo de todo esto.
Me pesa dejarlo, se que lo tengo que hacer, pero me duele, es mío, aquí pase los mejores años de mi vida.
Patricia trata de contenerme, las lágrimas han empezado a caer, me paso rápido las manos por las mejillas.
-Estas bien?
-Si, vamos por favor.
Llamo a un taxi que nos estaba esperando, el taxista guarda en forma mecánica las valijas, nos lleva al aeropuerto, y yo me alejo del hotel, que fue mi casa, mi lugar, mi vida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario