De sus tiempos en el teatro, había logrado tener amistad con algunos periodistas, sobre todo con una, Marcela, que era de su misma generación y que había empezado haciendo criticas, notas, entrevistas, más o menos en la misma época que Esteban empezaba a estrenar.
-Necesito un favor, Marce.
-Decime...
-Conoces o sabes de alguien de confianza que conozca a un hacker.
-¿Y para qué querés vos un hacker?
-Ya te vas enterar, créeme que es la noticia por lo menos del año, creo yo, pero par eso necesito pruebas.
-Che, parece diálogo de tu telenovela, jaja.
-¿No Marce, no jodas que esto es en serio, conoces a alguno?
-No, la verdad que no, pero algunos compañeros del área política o los de seguridad, si deben tener algún contacto.
-Me lo averiguas, haceme esa gauchada, por favor.
-Está bien, igual no te entiendo nada.
-No te preocupes, ya te vas enterar.
2 días después Marcela le pasó el dato de un hacker, muy bueno y muy caro.
Este hizo el trabajo en 1 día.
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